miércoles, 14 de diciembre de 2011

Ilusiones de la época navideña


Siempre me había sentido incómoda con el asunto de Santa y los Reyes Magos. Y que no se malentienda, me encanta la tradición, nunca tuve algún tipo de decepción con el tema, siempre me traían los juguetes que pedía incluso cuando me enteré de "la verdad" y seguí recibiendo regalos el día de reyes hasta la adultez.
Sin embargo me incomodaba tener que inventar mentira sobre mentira (de hecho nunca lo hice) a mis hijos para "mantener la tradición", sobretodo porque tengo un hijo muy inquisitivo que no se conforma con cualquier respuesta...
A la edad de mis hijos les encanta jugar con las posibilidades y la imaginación, pero también van buscando poco a poco aterrizarlo todo al mundo real, entonces sus preguntas iban dirigidas hacia la logísica: pero cómo es que compran los juguetes los reyes magos? por qué son los mismos juguetes de las tiendas? por qué hay niños que no les traen lo que piden? por qué a algunos niños más y a otros menos? ... Seamos honestos, no vivimos en un mundo ideal, mis hijos conocen niños a quienes a duras penas les compran algún juguete o ninguno, y también conocen niños en el extremo opuesto. Es duro explicar estas diferencias.
Luego está el hecho de que no me interesa el chantaje en mi relación con mis hijos, no puede ser que los regalos estén condicionados a que los niños hagan lo que yo quiera o se comporten como yo quiero, es cruel, es manipulación.
La mentira de que unos seres mágicos traen regalos discriminativamente a niños que no conocen se vuelve insostenible y cae por su propio peso. Tratar de sostenerla es un insulto a su intelecto.
Ante la ausencia de mis respuestas a mis hijos sólo les quedó una última pregunta: Si no existen los reyes magos, por qué aparecen juguetes bajo nuestro árbol? quién los compra? tú mamá?
Y después de pensarlo un rato, Santi rió de alegría -o de alivio- de sentir que había descubierto el hilo negro...

Mi madre dice que nunca me va a perdonar no sostener la mentira, imagina que ahora las navidades y los reyes magos han perdido una chispa porque mis hijos ya no están engañados. Pero es que por principio no acaba de entender nuestro ateísmo.

Mis hijos siguen emocionados, saben que es una tradición importante y les ilusiona sobremanera ahora que saben que esos regalos vienen de gente que los ama, sus padres, sus tías, sus abuelas. Les tranquiliza saber que el recibir regalos no depende de "portarse bien" sea lo que sea que eso signifique. Al contrario de lo que mi madre pudiera pensar no son menos felices y no están menos ilusionados que otros años; pero sí están más tranquilos, y sí los siento más cercanos, definitivamente más "iguales" y respetados -que antes-.

La verdad es liberadora, siempre. Así que en esta época en esta casa se respira libertad y espíritu festivo. No festejamos la navidad como tal, festejamos el hecho de estar juntos y seguir viviendo. Festejamos el incio de otro año. Probablemente cenaremos con las abuelas sabiendo que ellas tienen razones distintas para celebrar, y estaremos ahí respetando las diferencias, sabiendo que se vale creer en cosas distintas, creer y también no creer... Y repetiremos tradiciones como los regalos de santa o de los reyes magos por el simple gusto de hacerlo.

7 comentarios:

Silvia dijo...

Ale, es gracioso. Nosotros somos creyentes pero mis hijas saben que ni Santa ni los Reyes Magos ponen regalos... y no por eso han perdido ninguna chispa. Aun disfrutan muuuucho de las peliculas, de los regalos, y a mi entender disfrutan mucho mas sabiendo que son sus familiares y amigos quienes les dan amor y regalos segun pueden y gustan de hacerlo.
En mi caso nos parecio en lo personal que no nos gustaba la idea de que las ninias crean en ningun ser supernatural con poderes o 'milagros' digamos, aparte de Jesus, y tambien nos criticaron, pero no me importa en absoluto porque tenemos unas ninias muy felices y con mucha ilusion por la vida.
Besos,

Leticia Jiménez dijo...

lo de condicionar los regalos me parece tan feo, todos los niños merecen sus regalos de navidad.

aca aunque creen en los reyes (ya casi 10 años!) angela pues ilusionada, frida creo que ya va "atando cabos" pero como que no le mueve mucho al tema , de todas formas no pienso sentarme y decirle nada si ella no me lo pide, si ella me pide explicaciones (o angela) ya veremos como les explicamos.

abrazos , me encantan tus posts :)

Ivett dijo...

Ale, en casa tampoco hemos mantenido esa tradición por las mismas razones que tú (el mayor es un niño muy inquisitivo también). Sin embargo de todas formas le gusta escribir la carta y recibe con emoción los regalos. No sabia que tu también eras atea.

Voy a unirme a tu iniciativa de las regletas y a ver si en un ratito pongo ya la entrada en los comentarios del post.

Saludos

Ale dijo...

Exacto Silvia, yo es lo que he notado, que la ilusión no merma sino todo lo contrario ;)

Lety gracias por compartir.

Ivett mis hijos tienen sus cartas, la de Santi es enoorme ja, dice que es una lista preliminar e irá tachando hasta quedarse con tres cosas...ya veremos... Pero una cosa que me llamó la atenci´n es que pidió "que no haya tanta contaminación en el mundo" :)

Anónimo dijo...

Te felicito por tus comentarios.Sobre los reyes y papa noel.La fantasia se puede seguir pero,, Los hijos siempre tienen que saber la verdad,. HAY UN COMENTARIO DEL MISMO TENOR EN EL BLOG."aupitademamaypapa.blogspot.
ellos tienen "EL MIERCOLES MUDO". TE VA A GUSTAR. ,. EVE .- MABU

Ale dijo...

Gracias, es tan cierto!

Mis hijos están estos días tan ilusionados :)
Su estructura lógica del pensamiento ha sido respetada y aún vivirán el juego de la tradición -y recibirán regalos, eso lo saben, aunque no saben qué ni cuándo ni cómo voy a comprarlos, esa es mi sorpresa especial ;)-

Les emociona saber que son parte del mismo mundo que sus padres adultos y no están relegados.

gracias por la recomendación, iré a leer,

Ana P. dijo...

Andamos en lo mismo tu y yo =)